Por el Deseo a Soñar con una Venezuela Postchavista

 ¡Son ya más de veinte años en chavismo que sufrimos en Venezuela! y esta ocasión entre mi amiga Karina y yo, dos venezolanos migrados a Ecuador, queremos compartir una reflexión alrededor de la pregunta ¿Cómo sería reconstruir Venezuela terminada la era chavista? tomando los aprendizajes de transformaciones sociales vividas en Venezuela misma, y también en otros sures del mundo. 

Por el Deseo a Soñar con una Venezuela Postchavista: 

aportes de alternativas al desarrollo desde Venezuela y otros sures

Para muchos, Venezuela atraviesa un panorama sombrío, para octubre del 2019, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (en adelante, OIM) son aproximadamente 4,5 millones de refugiados y emigrantes los que han dejado Venezuela, al no encontrar condiciones mínimas para una vida digna. Esto constituye el mayor desplazamiento migratorio en la historia reciente de América Latina. Además, de acuerdo a información de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (en adelante, ACNUR) la emigración proveniente de Venezuela es una huída a la violencia, la inseguridad y la falta de alimentos, medicinas y servicios esenciales. Los motivos del éxodo son las condiciones de sobrevivencia que la gran mayoría de los habitantes se ve obligado a llevar, donde la inflación acumulada para el año 2019 fue de 7.374,4% de acuerdo a la información suministrada por la Comisión de Finanzas del Parlamento, a la agencia de noticias alemana DW, en enero del 2020, ya que no existen, desde 2016, datos oficiales sobre inflación provenientes de entidades gubernamentales.

Para otros, hacia el final del siglo XX y el inicio del siglo XXI, surgió una propuesta política con posibilidades de transformación social que creó los espacios y visibilizó a los sujetos protagonistas de esa transformación. Es menester que le aclaremos al lector a qué nos referimos por chavista y postchavista en este texto. Por chavista, entendemos, como lo entiende Gutierrez, 2017, “el complejo, variopinto y por momentos contradictorio proceso de subjetivación y activación de posibilidades políticas que se abrieron en el país caribeño en el amanecer del siglo XXI” pero además, agregamos que bajo este término nos referimos también a los lustros liderados por Hugo Chavez Frias entre 1999 y 2013 y su sucesor Nicolás Maduro Moros del 2013 hasta el momento presente y, por postchavista, al periodo de tiempo que iniciará una vez finalicen los mandatos de Nicolás Maduro Moros u otro gobernante que, en sucesión (electoral o no, legítimo o no), sostenga los lineamientos del llamado “proceso bolivariano” sin un cambio político de fondo.

 La invitación es a pensar la Venezuela postchavista desde nuevos paradigmas que contribuyan al encuentro y al bienestar común de todos los venezolanos y venezolanas. Para esto, en primer lugar, partimos de la hipótesis de que en la Venezuela postchavista los valores capitalistas serán exacerbados, los deseos y ambiciones de las nuevas generaciones estarán enfocados a todo aquello que, presuntamente les fue negado por el proyecto chavista y por la ilusión de vivir una Venezuela que solo existe en el imaginario de sus padres y hermanos mayores pero que ellos nunca conocieron. Pensamos pues, existirá un truncamiento aún más pronunciado en el significado identitario de ser venezolano, venezolana. Deberá existir entonces, un movimiento deliberado hacia la creación de espacios de reflexión y reconstrucción colectiva en el que sea posible aproximar alternativas al desarrollo de un lado y del otro, que posibilite la deconstrucción de identidades y estereotipos para dar paso a una visión colectiva de qué queremos ser como nación.

 


Imagen 01: chavismo

Queremos, con este ensayo, iniciar ese movimiento deliberado mediante el análisis de dos alternativas al desarrollo desde Venezuela: los consejos comunales y las comunas y CECOSESOLA y dos propuestas alternativas desde otros sures: el Kawsak Sacha (Ecuador) y el Swaraj (India) en diálogo con los conceptos de decrecimiento y algunas nociones y aportes del concepto de los comunes. No somos los primeros en lanzar una mirada a estas iniciativas en Venezuela, Gutierrez, 2017, concluye en su ensayo ¿Puede ser fértil la noción de “(re)formismo desde abajo” Reflexiones desde algunas experiencias de lucha en Venezuela que:

La cuestión más relevante es poner atención en las diversas experiencias de lucha cotidiana en marcha, autoproducidas dificultosamente en condiciones de gran adversidad, para construir y consolidar vínculos diversos entre hombres y mujeres para satisfacer en común —al menos parte de— las variadas necesidades de la reproducción colectiva de la vida (necesidades como vivienda,  alimento,  espacios  para  intercambiar)  o  para echar a andar otros proyectos y dar cuerpo a otros deseos imaginados en común. Estos vínculos y ensayos son los que permiten ir, en lapsos largos de tiempo, más allá, contra y más allá del capital y del estado. (p.111)

 

Alternativas al desarrollo desde Venezuela

CECOSESOLA: la Red de Cooperativas CECOSESOLA (en adelante, CECOSESOLA) tiene un trabajo de red que ha evolucionado desde sus inicios en un proceso cooperativo iniciado en 1967 en Barquisimeto; tal como exponen en su sitio web “se trata de un espacio de encuentro donde hacemos vida activa más de 50 organizaciones comunitarias, integradas en una red de producción de bienes y servicios que reúne a más de 23.000 asociados provenientes de sectores populares”. Ya con más de cincuenta años de existencia y un proceso evolutivo constante, actualmente CECOSESOLA desarrolla actividades agrícolas, así como producción industrial, de ahorro y crédito, además, ofrece servicios funerarios y de salud; siendo económicamente sostenible sin subsidios y, aunque opera sin fines de lucro, sí se manejan márgenes pequeños de ganancias monetarias que permiten la reinversión en la organización para su fortalecimiento (varios autores, 2015). Se trata de una experiencia que económicamente ha sido exitosa y que plantea un modo organizativo que aunque  ya lleva décadas, se considera “alternativo” en un contexto capitalista hegemónico. Para Gutierrez, 2017, lo alternativo radica en que han logrado con éxito mantenerse al margen del cooperativismo tradicional instaurando procesos robustos de autogestión y autoproducción, también al margen de regulaciones y límites estatales. Con insumos de Gutierrez, 2017, resumimos a continuación las características salientes de la experiencia de CECOSESOLA:

       Iniciativa constituída desde abajo;

       Capacidad para resolución de problemas;

       No se hace distingo de preferencias políticas entre sus miembros;

       Autogestión y toma de decisión colectiva;

       Organización en movimiento, adaptación a los cambios de toda índole a lo largo del tiempo;

       Al ser cooperativa, son vistos o catalogados desde afuera bajo criterios rígidos de comprensión del cooperativismo tradicional;

       Sujetos a la amenaza constante de un Estado regulador.

 

Imagen 02: logo CECOSESOLA

Los consejos comunales y las comunas: Según Fréitez y Martinez, 2015, los consejos comunales surgen formalmente en el 2006, bajo la Ley Orgánica de los Consejos Comunales LOCC, la cual sufrió una reforma en el 2009. Los consejos comunales constituyen instancias de base pensadas para la construcción de otras formas de gobierno basadas en la autogestión y la participación ciudadana, ya las comunas, son instancias de mayor poder y toma de decisión que agrupan a varios consejos comunales, a veces, números cercanos a un centenar.

 

Al tiempo de su creación los consejos comunales fueron bastante criticados por los movimientos de base, las autoras supracitadas y también Gutierrez, 2017 relatan como asociaciones civiles, juntas de vecinos y otras organizaciones comunitarias se vieron transformados en organizaciones ilegítimas al margen del nuevo marco legal. Adicionalmente, hay otras críticas a esta alternativa que serán enumeradas más abajo, sin embargo, resaltamos que existe una estructura gestada a partir del establecimiento de los consejos comunales y las comunas y que no es parte de las figuras previstas en la Ley Orgánica de los Consejos Comunales, los “Corredores territoriales comunales”.

 

Los corredores territoriales comunales consisten en la agregación de consejos comunales, comunas, pero también, otras organizaciones sociales y comunitarias, otros actores que hacen vida y se interlocutan a los anteriores y participan del autogobierno de un territorio más amplio y en interdependencia, redefiniendo y superando límites político-territoriales impuestos desde el Estado-nación. Códigos Libres, nos ofrece una definición para los mismos:

Los Corredores Territoriales Comunales son espacios autogobernados que rompen con la división político-territorial del Estado Nación, sus disputas se centran fundamentalmente en la constitución de sentidos y prácticas de vida justas, solidarias, autogestionadas y sustentables, así como la obtención legal y legítima de la propiedad colectiva de la tierra, bienes y medios de producción de interés y necesidad económica, política y cultural para la reproducción de la vida.

 

Gutierrez, 2017, en su ensayo sobre las luchas en Venezuela no comenta sobre los corredores territoriales, sin embargo, creemos los autores, que las mismas configuran un ejemplo de lo que ella llama en otro ensayo de la misma obra un Horizonte comunitario-popular que reduce progresivamente el estado-centrismo de los consejos comunales y comunas, una vez que las mismas fueron impulsadas desde la política pública y genera, ahora sí desde las bases un proceso de transformación social desde el (re)formismo.

 

Las características salientes de esta alternativa que podemos destacar, con insumos de Fréitez y Martinez, 2015 y de Gutierrez, 2017 son:

       La conformación de los consejos comunales y comunas fue impulsada como política de Estado (un estado con mayúscula, Gutierrez, 2021);

       Su ejercicio del poder y la toma de decisiones se limitan al ámbito local (esto es algo que los corredores territoriales comunales intentan resolver);

       Son vulnerables a la instrumentalización por parte del gobierno y su partido con fines político-partidistas (como ha ocurrido);

       Requieren de una conciencia elevada por parte de sus miembros para el establecimiento de una autogestión verdadera y duradera;

       En su mayoría carecen de autonomía económica;

       Carecen de legitimidad entre otros actores sociales por su naturaleza de política de Estado.

 

La fortaleza y potencialidad para la transformación social de estas iniciativas yace en los procesos impulsados desde abajo. No importa si bajo el nombre tan tradicional como la cooperativa o desde la promoción estatal hacia la autogestión. Si la alternativa no vino desde abajo, es bastante probable que su poder transformador no exista o se diluya con el tiempo.

    Pensando en la Venezuela postchavista, vemos mucho valor en la práctica de CECOSESOLA al no hacer distinción de preferencias políticas entre sus miembros, o en un lenguaje más coloquial, dejando lo político en la puerta. Puede resultar contradictorio para alguien que no haya vivido en Venezuela los últimos 23 años, ¿Cómo dejar a un lado la política cuando no hay nada más político que lo que se hace al interior de CECOSESOLA? Comprendemos los autores que esto es una estrategia para el buen funcionamiento y éxito de la iniciativa, sus miembros hacen a un lado ser o no partidarios del gobierno y se enfocan en su misión: tener capacidad para solucionar problemas. Solucionar un problema une, y para eso no importa si eres o no chavista.

 

El poder del discurso y el lenguaje

Es necesario reconocer entonces el carácter decisivo que tendrá el lenguaje en la Venezuela postchavista, una vez que durante la era chavista tanto discurso y léxico fue vaciado de significado e instrumentalizado para fines político-partidistas, especialmente del 2013 en adelante durante los gobiernos de Nicolás Maduro Moro.

Si nos situamos en el día cero del postchavismo, a partir de allí la decisión de seguir curso como nación siguiendo el ideal del “desarrollo” basado en crecimiento económico que en la segunda mitad del siglo pasado tuvo su auge y que lamentablemente, tras un período de promoción de transformaciones sociales y políticas redistributivas pero que no logró abandonar el rentismo y clientelismo basado en el extractivismo ora el petróleo, ora los minerales, se mantiene. O en su lugar, si queremos repensarnos como nación con maneras alternativas a esa idea hegemónica de supuesto desarrollo. Se hace crítico que la experiencia y los aprendizajes generados durante el chavismo no sean descartados.  Tal como ya revisamos, la experiencia vivida con las Comunas y Consejos Comunales no fueron lo que se esperaba, y aunque hay excepciones honrosas, es un hecho que la tendencia fue a convertirse en apéndices del partido de gobierno en los territorios. Tal como nos advierte Adrián Beling (2019) “al mismo tiempo, sin embargo, el imaginario del desarrollo está fuertemente impregnado en la identidad política de los países latinoamericanos, por lo que el cuestionamiento frontal del crecimiento económico implicaría ir contra el sentido común establecido” (p. 294).

En el caso de Venezuela, esta advertencia que nos trae Beling a colación cobra especial relevancia al momento de plantear alternativas al desarrollo. Ya que no solo hay que manejar un lenguaje asertivo con la población que, ante un sentido común capitalista hegemónico establecido, se le suma todo el bagaje de términos recordados de las dos primeras décadas del siglo XXI -y contando-; a saber, términos como: comuna, cooperativismo, desarrollo endógeno, políticas redistributivas, participación comunitaria, propuesta antihegemónica/anticapitalista, revolución, entre otros. Lamentablemente, todos los venezolanos, emigrados o no, tenemos en la memoria colectiva la ruina de nuestras vidas familiares y sociales asociada con estos términos.

Con estos elementos 1) contexto capitalista hegemónico, e 2) historia reciente; el discurso para la construcción es tan importante como las alternativas/propuestas en sí. Venezuela, al pertenecer al sur global, con un significativo histórico de rentismo petrolero, tiene una concepción hegemónica del “desarrollo” que a pesar de todo sigue siendo un elemento clave en el discurso institucional, por esto hay que trabajar en discursos asertivos para la transición, hacia otros modos de vida.

 

Imagen 03: Movilización de la oratoria y el discurso de masas

Aportes desde el decrecimiento

Si bien la concepción de desarrollo basada en crecimiento económico es la hegemónica y arraigada en la sociedad venezolana, pensamos que siguiendo con esta línea de un discurso para la transición, hay que tener presente que esto es algo que ya autores lo han reflexionado, así como Beling ya advirtió, también Arturo Escobar (2017) nos expone:

 

el surgimiento de visiones para la transición lleva décadas (...). De hecho, la emergencia de narrativas, imaginarios y propuestas para la transición en varios espacios de vida académica y activista en la última década es uno de los signos más anticipatorios de nuestro tiempo. La mayoría de discursos para la transición (DT), como los llamaré, comparte la afirmación de que tenemos que ir más allá de los límites institucionales y epistémicos existentes si realmente queremos luchar por mundos y prácticas capaces de lograr las transformaciones significativas que creemos necesarias. (p. 34)

 

Ya hablando de las alternativas a esa idea de desarrollo hegemónico, Escobar destaca la importancia de la narrativa y los imaginarios para construir un futuro deseable, que nos motive a tomar acciones en el presente. Así, podemos asumir que nos encontramos aún en la era chavista, pero, simultáneamente, en términos temporales también en el postchavismo de transición. El discurso y la narrativa, para la transición a una Venezuela postchavista debe ser manejado con algunas especificidades. En ese sentido, vemos que desde la corriente teórica de Decrecimiento, se pueden identificar aportes a propuestas con términos que no generen rechazo en la sociedad venezolana.

Hablando en términos académicos, se tiene que el Decrecimiento tiene en el sur global un discurso para la transición que incluye hablar de:

       Sincerar los entramados desarrollistas más allá del discurso en el proceso bolivariano y las políticas públicas vigentes;

       Separar desarrollo de crecimiento económico e introducir el concepto de decrecimiento para que, como nos indica Escobar, 2017, no se cree la falsa percepción de que el Norte necesita decrecer y el Sur aún necesita desarrollo, y más bien se genere una discusión en tándem global que tome en cuenta las especificidades políticas de cada uno. Escobar plantea además dos debates clave: conceptos de buen vivir y los Derechos de la Naturaleza.

       Atribución de significado situado territorialmente a términos inherentes a la corriente del decrecimiento como Compartir, Simplicidad, Convivencialidad, Cuidado, Procomún, Autonomía, en sustitución a los términos que pueden generar divisionismo y desinterés por parte de los ciudadanos.

 

Con estos aportes, un discurso para la transición a la Venezuela postchavista, puede incluir aquellos elementos de alternativas de la era chavista como CECOSESOLA o los corredores territoriales comunales que son positivos y que no deben ser dejados de lado, bajo un nombre o término que sea inclusivo y que como nos enseña CECOSESOLA deje las tendencias político-partidistas de cada individuo en la puerta. Los venezolanos y venezolanas han ganado ciertos valores sociales generados por lo profundo de su crisis estructural y la necesidad de satisfacer sus necesidades como: el intercambio de mercancías por su valor de uso y no de cambio, reducir el consumo de bienes materiales superfluos, entre otros. Esto nos permite ser optimistas con relación a las posibilidades de apertura a plantear discusiones sobre alternativas al desarrollo y Decrecimiento, pues frente a las necesidades urgentes que viven los ciudadanos urgen aún más las soluciones.

    Los aportes del Decrecimiento para la Venezuela postchavista, van más allá de solo elementos discursivos. También hay planteamientos que pueden ser llevados a la práctica para transformar cultural, económica y políticamente a la nación. Exponer una transición al postextractivismo se convierte en una clave para que Venezuela no dependa de la extracción petrolera, pero tampoco de ningún mineral o de algún uso extensivo de suelos para el cultivo de algún commodity. Como nos dice Escobar, 2017, la transición al postextractivismo es una de las mejores propuestas elaboradas desde América del Sur, partiendo de la crítica a modelos extractivistas actuales, para pensar en modos de producción donde el principal objetivo no sea la acumulación persé, sino que busca transformar las actividades extractivas para minimizar sus impactos ambientales, culturales y sociales, planteando objetivos de cero pobreza y  cero extinciones.

Además, desde el sur global hay alternativas que, tomando en cuenta el buen vivir y los derechos de la naturaleza han desarrollado sus propias visiones de bienestar y reproducción de la vida, como el Kawsak Sacha del pueblo Kichwa de Sarayaku y el Swaraj de la India, en los que también encontramos elementos y contribuciones para el debate planteado en este ensayo.

 

Alternativas desde otros sures

El Kawsak Sacha: El Kawsak sacha es la propuesta del pueblo Kichwa de Sarayaku (amazónia ecuatoriana), lo han traducido al español como La Selva Viviente, es decir, es, un ser vivo, con conciencia, que incluye a todos los seres de la selva, desde los más infinitesimales hasta los más grandes y supremos. Incluye a los seres de los mundos animal, vegetal, mineral, espiritual y cósmico, en intercomunicación con los seres humanos, brindándoles a éstos, lo necesario para revitalizar sus facetas psicológicas, físicas, espirituales, restableciendo así la energía, la vida y el equilibrio de los pueblos originarios. Todo esto, está plasmado en su manifiesto.

Resumimos a continuación, los principales aportes de esta alternativa, que pueden ser aporte a la Venezuela postchavista:

       El Kawsak Sacha, nos permite tomar en cuenta la interrelación e interdependencia de los seres humanos con los seres no humanos y el entorno, por lo cual es un modelo de reproducción de la vida;

       El propio proceso llevado por el pueblo de Sarayaku para concretar el Kawsak Sacha como una propuesta de una forma de Buen Vivir permite imaginar cómo sería ese proceso a la pregunta de ¿Qué queremos ser como nación? que se planteaba más temprano en este ensayo;

       Es una propuesta que busca la armonía de la vida, la perpetuidad cultural, por lo cual la podemos considerar sostenible;

       El Kawsak Sacha, prevé que ciertas condiciones deben mantenerse para que sea posible.

Imagen 04: Propuesta de Kawsak Sacha

El Eco-Swaraj

El Swaraj, (swa- “mío”, raj “La regla”), es un concepto de Mahatma Gandhi para referirse a la independencia India de la dominación extranjera. Promueve el autogobierno a través de los individuos y el empoderamiento de la comunidad. Apropiándose de este concepto, surge el Eco-swaraj, defendido por varias organizaciones ambientalistas, activistas y académicos indios para identificar a movimientos en la India que buscan re-definir sus relaciones con el medio ambiente. Contiene el profundo significado político y económico del Swaraj de Gandhi pero además, incluye asumir la responsabilidad con el resto de la naturaleza, en palabras de Ashish Kothari.

El Eco-swaraj ha sido el concepto guía por detrás de transformaciones de comunidades agrícolas rurales de la India, a continuación resumimos los principales aportes que identificamos en el Eco-Swaraj como alternativa:

       Romper con la división rural-urbana y en su lugar pensar en las zonas de intercambio sostenible.

       Planes de conservación inclusivos y diseñados y conformados desde la comunidad;

       Foco en la reducción y eliminación de la pobreza y reproducción de la vida;

       Recomunización de la tierra y democratización de la economía;

       Una nueva concepción del trabajo, fuera de la modernidad y siendo parte de las labores comunitarias;

       Democratización de la educación y conformación de espacios de educación más horizontales y alternativos.

 

Imagen 05: Propuesta Eco-swaraj

Después de haber analizado las dos alternativas desde otros sures, nos encontramos con un paralelo muy interesante entre las zonas de intercambio sostenibles del Eco-Swaraj, los horizontes comunitario-populares planteados por Gutierrez (2017) y los corredores territoriales comunales identificados por Fréitez y Martinez (2015). En este caso, la base de encuentro es el autogobierno y la eliminación del estado-centrismo. Además, encontramos otro paralelo entre la corriente del Decrecimiento, el Kawsak Sacha y el Eco-Swaraj al enfocarse en la reducción y eliminación de la pobreza y la reproducción de la vida como objetivo central a ser perseguido.

 

Conclusiones

     Recordando la pregunta que nos cuestionó al inicio de este ensayo sobre cómo transformar desde una coyuntura desoladora sin desprecio a las conquistas sociales y las buenas experiencias de los últimos 23 años en Venezuela y otros sures y habiendo recorrido los aportes desde Venezuela, y desde otros sures como los del pueblo Kichwa de Sarayaku e India, así como los planteamientos desde el Decrecimiento y los comunes, algunos elementos que podemos rescatar para que los aportes que destacamos tengan sentido para la transformación hacia una Venezuela postchavista son: resignificar los muchos comunes que nos unen, fomentar el fortalecimiento del tejido social tan necesario para enriquecer nuestras muchas y diversas venezolanidades; la protección y recuperación ecológica de nuestra naturaleza; el fortalecimiento de nuestra dimensión política y nuestra participación efectiva y autónoma mediante el involucramiento en el diagnóstico de las problemáticas locales, regionales y nacionales, que genera un sentido de pertenencia profundo a nuestro territorio y favorece la construcción de soluciones desde abajo.

También, considerar los aprendizajes de todas las experiencias vividas durante la era chavista, con aportes que invitan a preservar los intereses comunes por sobre los individuales, una redimensión del trabajo como elemento para reproducir la vida y cuidado de la naturaleza de la cual formamos parte. 

 

Imagen 06: reconstrucción de Venezuela

Referencias Bibliográficas

Veraza, Jorge. La Basura al Final del Día Síntesis del modo de producción capitalista. México DF. 2008.

Sin Autor. Crisis de Refugiados y Migrantes Venezolanos. 2019. Extraído el 06 de marzo del 2021 en: Crisis de Refugiados y Migrantes Venezolanos | Organización Internacional para las Migraciones (iom.int)

Sin autor. La Inflación de Venezuela en 2019 superó el 7000%, según la AN .Consultado el 05 de marzo del 2021 en: La inflación de Venezuela en 2019 superó el 7.000%, según la AN | Venezuela en DW | DW | 13.01.2020

Colectivo de autoras y autores de Cecosesola. Venezuela: la red cooperativa Cecosesola. Quito. 2015.

Comunalizar el poder. Sistemas de agregación comunal: Los corredores territoriales comunales. Consultado el 8 de marzo del 2021 en: https://www.comunalizarelpoder.com.ve/sentidos-comunes/alternativas-de-vida-y-economia-para-comunalizar-el-poder/modulo-1

Escobar, A. Diseño para las transiciones. Etnografías Contemporáneas, Año 3, N°4, pp. 32-63. 2017.

Beling, A. Sinergias Sur-Norte para una “transición civilizatoria” hacia la sustentabilidad: diálogos de saberes entre buen vivir, decrecimiento y desarrollo humano. Revista Colombiana de Sociología, 42(2), 279-300. 2019

Kothari,. A., Joy, K. Alternative futures india unshackled. Authors Upfront. 2017

Pueblo Kichwa de Sarayaku. Declaración Kawsak Sacha. Consultado el 06 de marzo del 2021 en: https://kawsaksacha.org/es/

Giorgos Kallis, F. y Giacomo, D’Alisa. Decrecimiento, p. 36-61 en Decrecimiento: un vocabulario para una nueva era. Icaria Antrazyt y Heinrich Boll Stiftung, 2015.

Gutierrez, R. Políticas en Femenino: transformaciones y subversiones no centradas en el Estado. 67-86 en Horizontes comunitario-populares, Creative Commons. 2017.

Gutierrez, R. ¿puede ser fértil la noción de “re(formismo) desde abajo”? reflexiones desde algunas experiencias de lucha en Venezuela. 87-112, en Horizontes comunitario-populares, Creative Commons. 2017.

Sin autor. Eco-Swaraj — An old concept for a new green world. Consultado el 20 febrero del 2021 en: Eco-Swaraj — An old concept for a new green world | Eco India | DW | 01.10.2020

 

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Hablemos sobre Extractivismo y Lucha en el Chocó Andino

Pueblos Indígenas en Venezuela, ante la Emergencia por COVID-19

Pronunciamiento de la Pastoral Social Cáritas Zona Sur del Ecuador frente a la Amenaza en las Fuentes Hídricas por la Minería