Hablemos sobre Territorios Hidrosociales y Arco Minero del Orinoco

Hoy quiero compartirles un aporte, alrededor de un concepto al que he venido dándole algunas vueltas, se trata de los Territorios Hidrosociales, lo cuales según Boelens (2017) se trata de "espacios constituidos social, natural y políticamente que son (re)creados mediato interacciones entre las prácticas humanas, los flujos de agua, las tecnologías hidráulicas, los elementos biofísicos, las estructuras socio-económicas y las instituciones político-culturales" (p. 85). Se trata de un concepto algo innovador, el cual trato de parafrasearle tropicalmente como la configuración de territorios que se da con la interacciones de sociedades con los flujos hídricos que ahí ocurren, interacciones que son con ocasiones económicas, políticas o culturales. 

Así, intenté hacer una reflexión/aporte sobre como esas interacciones y Ciclos Hidrosociales se han visto y se ven alteradas artificialmente por la presencia de la iniciativa del Arco Minero del Orinoco, al sur de Venezuela. 


Imagen 01: Resistencia contra el Arco Minero del Orinoco

fuente: facebook de la Plataforma Contra el Arco Minero del Orinoco

Territorios Hidrosociales y Arco Minero del Orinoco

El 24 de febrero del 2016, se publicó el decreto 2.248 sobre la creación de la Zona de Desarrollo Estratégico Nacional Arco Minero del Orinoco, el cual representa una iniciativa ambiciosa de la tiranía venezolana declarando territorios al sur del río Orinoco para la exploración y explotación de recursos minerales a gran escala. Hay que destacar que se trata de un territorio de 111.843,70 Km2, o lo que es lo mismo el 12,2% del territorio de la nación.

En un trabajo publicado por Acosta (2019) para la web amazoniasocioambiental.org, destaca que se trata de una superficie mayor a la de países como Cuba, Portugal o Bélgica; al mismo tiempo agrega que esto, atenta contra el derecho humano a un ambiente sano, amenaza los derechos de los pueblos indígenas, y reafirma una política desarrollista donde poco o nada importan la vida humana y la naturaleza.

 

Imagen 02: Mapa del Arco Minero del Orinoco

Fuente: Arco Minero del Orinoco (AMO): un modelo de minería responsable – Ministerio de Desarrollo Minero Ecológico

Estas decisiones han configurado una amenaza sin precedentes en el territorio al sur del río Orinoco, que históricamente ha sido una región con poco impacto desarrollista. Aunque hay experiencias extractivistas en las periferias de la región, como las extracciones de bauxita en Los Pijiguaos, de oro en El Callao y Tumeremo, de hierro en la Sierra Imataca o grandes proyectos hidroeléctricos en el río Caroní.

Ahora bien, la construcción histórica de estos territorios con alta presencia de pueblos indígenas como los Yekwana, Sánemas, Pemones, entre muchos otros; han configurado relaciones entre dichas sociedades con el agua y su entorno natural que, producto de esas interacciones se construyen vínculos estrechos entre los habitantes con los ciclos hidrológicos que les rodean, gestionando el agua para su bienestar y haciendo uso del medio para reproducir la vida en condiciones sustentables, como es el caso del uso de los ríos Caura, Caroní, Paragua, Aro y muchos más; como vías de comunicación, y el conocimiento de sus estaciones de inundaciones y sequías para determinar ritmos de vida. Estos vínculos entre pueblos con dichos ríos, son una evidencia de que el agua puede ser un actor físico y social en sus procesos culturales y políticos que puede hasta convertirse en frontera, o en un recurso regenerador (Boelens, 2017).

La noción de las redes hidrosociales se entiende como que “son redes configuradas de forma intencional y recursiva en torno al agua y su uso; son el resultado precario y reversible de determinadas formas de organización” (Boelens, 2017, p.89). Es importante entender estos conceptos que aportan a una comprensión de esos vínculos que se van tejiendo entre las sociedades con su entorno natural y mayormente con el agua.

Junto a esta idea de territorios hidrosociales, hay que entender la territorialización como un proceso de redes socio-naturales que son construidas por personas ligadas al espacio al que están (Boelens, 2017). Pero, ¿por qué hablar de territorios hidrosociales en el marco del Arco Minero del Orinoco? Y es que el rol del Estado-Nación se ha convertido en un elemento que impacta directamente en esas redes hidrosociales locales y regionales. La cantidad de ríos en este territorio en cuestión, con la cantidad de nacionalidades originarias (aunque algunos funcionarios afirmen que no hay pueblos indígenas en este territorio) se ven arrollados por esto que se les impone. Hablando del rol de la política, Boelens (2017) nos advierte que “los planes y proyecciones para organizar el territorio hidrosocial prevén formas muy diferentes de rediseñar los medios de subsistencia y la producción local, así como el desarrollo económico y socio-natural regional” (p. 91).

De esta manera, observamos este proceso específico que hay alrededor del impacto que tiene una política invasiva, sobre los ciclos hidrosociales presentes en un territorio, que se ven amenazados por la acción de prácticas como el uso intensivo del mercurio que, según el Informe sobre situación de derechos humanos en el Arco Minero “en el caso de Guyana, donde el transporte y comercio de este mineral es legal, el mercurio es traído desde la capital Georgetown a Eterimbán y Cañamú, poblados ubicados en las riberas del Cuyuní y llevado a San Martín de Turumbán, poblado minero ubicado en la ribera opuesta, del lado venezolano” (p.24).


Así, son evidentes las consecuencias socio-ambientales y políticas que hay al sur del Orinoco, donde los procesos de “gubernamentalizan” el territorio han producido espacios con relaciones jerárquicas entre gobernantes del agua y los actores locales, tipo de relaciones estas ajenas a las culturas amerindias, e incluso a la cultura criolla/mestiza. En este caso emblemático, hay evidencias de que estas nuevas redes hidrosociales se entrelazan con fines de generar una transferencia de lo local a lo global de mercancías (en este caso minerales) para fortalecer una idea desarrollista neoclásica.

 

Bibliografía

Boelens, R., Hoogesteger, J., Swyngedouw, E., Vos, J., Wester, P. Territorios hidrosociales: una perspectiva desde la ecología política. Recursos, vínculos y territorios inflexiones transversales en torno al agua, pp. 85-104. 2017.

Sin Autor. Arco Minero del Orinoco (AMO): un modelo de minería responsable. Extraído el 09 de marzo del 2021 de: Arco Minero del Orinoco (AMO): un modelo de minería responsable – Ministerio de Desarrollo Minero Ecológico

Acosta, P. Arco Minero: “Chernóbil ecológico” que arrasa con el pulmón de Venezuela. 2019. Extraído el 09 de marzo del 2021 de: Arco Minero: “Chernóbil ecológico” que arrasa con el pulmón de Venezuela – RAISG (amazoniasocioambiental.org)

Varios autores. Informe sobre situación de derechos humanos en el Arco Minero y el territorio venezolano ubicado al sur del río Orinoco. Centro para la Reflexión y la Acción Social y Plataforma contra el Arco Minero del Orinoco. 2020.

 

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